Según los datos de la Superintendencia de Banca y Seguros y AFP (SBS), al cierre de julio del 2022 estos plásticos sumaron más de 50,9 millones, cifra mayor en 38,9% (o en 14,3 millones) a la registrada a multas del año pasado y que supone un incremento del 68% si se compara con el cierre del 2019, previo a la crisis sanitaria.

Además, en la encuesta realizado por el Banco Mundial, el 36% de los peruanos dijo poseer una tarjeta de débito, porcentaje mayor al del sondeo del 2017 (28%).

A la fecha, los bancos tienen la mayor participación sobre el total de dichos plásticos (85,6%). Luego están las cajas municipales (10,6%) y las financieras (3,8%).

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Qué razones explican el crecimiento

El repunte del número de tarjetas de débito estaría vinculado, en primer lugar, con la mayor digitalización de los pagos impulsados ​​por la pandemia, señaló Jorge Carrillo Acosta, profesor de Pacifico Business School.

Por ejemplo, se han visto un crecimiento de las y de las compras por Internet y una mayor preferencia por pagos sin contacto, correspondientes. “En teoría, la herramienta más común en estos casos debería ser la tarjeta de crédito, pero los bancos restringieron su emisión el año pasado”, apuntó.

“Durante la pandemia hubo una mayor familiarización de las personas de sustituir el efectivo por las tarjetas, perdieron el miedo y vieron lo práctico que podría resultar su uso”, señala Arturo García, profesor de los programas de Finanzas de Esan.

Además, se privilegió la utilización de las tarjetas de débito sobre los créditos por el incremento del costo de financiarse con las segundas, añadió García.

Yang Chang, docente del Programa Especializado en Finanzas de la Universidad de Piuraexplicó que el desembolso de los entregados por el gobierno y los de las AFP requirieron que se abran cuentas en las instituciones financieras. “Entonces, para retirar ese dinero necesitas una tarjeta de débito”, agregó.

En muchos de estos casos, las personas tuvieron por primera una cuenta bancaria y una tarjeta de débito, apuntó Carrillo.

Además, ahora casi todas las entidades financieras ofrecen estas tarjetas, pues también se usan para retirar los préstamos desembolsados, refirió Chang.

En los últimos años, también, la banca ha emprendido campañas para impulsar un mayor uso de este medio de pago mediante programas de fidelización, que incluyen descuentos y ofertas en las compras, señalando a los expertos.

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