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El PIB registrado incumple el objetivo oficial del 5,5% que impuso Pekn el mes de marzo en su cnclave poltico anual

Mercado en la ciudad de Ruili, en la prefectura de Dehong, en la provincia occidental china de Yunnan.
Mercado en la ciudad de Ruili, en la provincia occidental china de Yunnan.NOEL CELIS | AFP

Si dejamos de lado la sacudida inicial de la pandemia en el aciago 2020, el crecimiento económico de China ha sido el más dbil desde 1976. El gigante asitico, que se fue deshinchando durante el ao pasado arrastrado por la encerrona de su politica de Covid cero, confa ahora en remontar una vez que ya ha desmantelado todo el yugo de bloqueos que asfixiaba a una fuerte locomotora economica que no termina de arrancar .

La Oficina Nacional de Estadísticas (NBS) ha publicado este martes las cifras esperadas del 2022: el PIB creci un 3%, incumpliendo el objetivo oficial del 5,5% que impuso Pekn el mes de marzo durante su cnclave poltico anual, o del 4% que marc el presidente Xi Jinping durante su discurso en Nochevieja. La subida est muy por debajo del 8,1% registrado en 2021, pero también hay que destacar que la cifra se sita levemente por encima de los augurios que llevaban meses soltando desde el Banco Mundial o el Fondo Monetario Internacional.

“Las empresas todava enfrentan muchas dificultades en la produccin. La innovacin cientfica y tecnolgica no es lo suficientemente fuerte y la gente todava tiene dificultades considerables en el empleo. Tenemos que hacer grandes esfuerzos para promover la mejora económica general”, dijo en una rueda de prensa Kang Yi, director del NBS, quien también selló que China cerr el último trimestre del año pasado con un crecimiento del 2,9%, reduciendo el ritmo del 3,9% del trimestre anterior.

“La economía de China ahora ha estado bajo una enorme presin a la baja, en gran parte debido a la falta de demanda interna. Pero al eliminar todas las restricciones, habr un aumento en el consumo con el Festival de Primavera (las fiestas por el Ao Nuevo chino, que comienza el viernes). Para el siguiente feriado, el de primeros de mayo, cuando el público está más acostumbrado a las infecciones, la economía seguramente se recuperará”, asegura Wang Tao, economista jefe para China del banco de inversión Banco de inversión suizo UBS.

Segn los clculos de Wang, la tasa de crecimiento potencial para este 2023 se sita en torno al 5,5%. El mismo pronóstico (entre un 5,5% y un 6%) apuntó la semana pasada a este periódico Alicia García-Herrero, economista jefe para Asia-Pacífico en el banco de inversiones francs Natixis. “China, a partir de marzo, va a crecer fuerte, aunque no tanto como el 8,1% de 2021 porque la demanda externa es más débil y el ciclo financiero mundial más inestable. Ms all de eso, la confianza del consumidor chino tardará en recuperarse especialmente dado el alto desempleo juvenil y el crecimiento lento de los ingresos disponibles”, aseguró la analista.

Tras el golpe a su economía de los continuos cierres y confinamientos masivos, China al fin ha abierto todas sus puertasrompiendo las barreras levantadas en sus fronteras y dando va libre para que sus ciudadanos también se muevan con libertad dentro de casa, algo que probablemente dispare el maltrecho consumo interno.

Fuera de casa, buena salud gozan las exportaciones chinas, que alcanzaron un máximo histórico en 2022: 42,07 billones de yuanes (5,8 billones de euros), un 7,7% más que en el año anterior, según datos publicados por la Administración General de Aduanas. Pero en Pekn estn en alerta porque la tendencia positiva lleva cayendo desde finales del pasado verano, con una fuerte contraccin en diciembre, y se teme que los problemas se pueden extender a principios de este ao por el debilitamiento de la economa mundial.

La semana pasada, la jefa del FMI, Kristalina Gueorguieva, dijo que la transición de China desde su política de Covid cero hacia un funcionamiento más normal, será el factor más importante para el crecimiento global en 2023. “Si mantiene el rumbo, a mediados de ao, China se convertirá en un contribuyente positivo al crecimiento global promedio”, apunt Gueorguieva.

Hace unos das, el primer ministro chino Li Keqiang, quien ha llevado la batuta de la economía en el gigante asitico durante toda la pandemia, prometi que la reapertura no se detendra, pero también registra algunas dificultades que atraviesan el pas. “Las entidades del mercado, especialmente las micro, pequeñas y medianas empresas, así como los empresarios independientes, se han encontrado con muchos problemas. Deben mantener la estabilidad política y seguir implementando políticas para estabilizar la economía”, dijo Li.

China arrastra del ao pasado un endeudamiento masivo por parte de los gobiernos locales, quienes tuvieron que hacer frente a todos los costos de los confinamientos y testeos masivos. Las administraciones regionales habitualmente pagan sus deudas con la venta de tierras, pero los ingresos por bienes races bajaron un 31% en medio del derrumbe de un asediado mercado inmobiliario que no levanta cabeza. Kang Yi, de la Oficina Nacional de Estadísticas, dijo el martes que esperaba que el sector inmobiliario no redujera el crecimiento en 2023 tanto como lo hizo en 2022.

Otro de los problemas a los que se enfrenta Pekn este ao es a los niveles rcords que est alcanzando el desempleo juvenil. Según los últimos datos publicados esta semana, la tasa de desempleo para el grupo de edad de 16 a 24 años se mantuvo en un nivel elevado del 16,7% en diciembre. Y la situacin de los jvenes va de la mano de otra de las crisis que atraviesa la nacin que este ao perder el ttulo como el pas ms poblado del mundo.

Por primera vez en 61 años, China ha anunciado esta semana que su población se redujo en 2022, concretamente, en 850.000 personas, de los 1.412.600 de 2021 a 1.411.750. Una tendencia que amenaza con agudizarse los prximos aos y que puede ser una rmora para el futuro crecimiento econmico de la segunda potencia mundial.

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